Hay muchos medicamentos existentes que, en algunos casos, han estado en el mercado durante décadas con autorización para condiciones específicas. Los Institutos Nacionales de Salud financiaron recientemente una investigación sobre una exploración de estos medicamentos existentes para encontrar uno que pueda reutilizarse como tratamiento para el Alzheimer y, según anunció el NIH, se ha descubierto un posible candidato. El tratamiento potencial para el Alzheimer es una píldora de agua común (diurético) que ya está aprobada por la FDA.
El fármaco se llama bumetanida y, según reveló la investigación, puede ser un candidato potencial para el tratamiento de las personas con riesgo genético de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. Entre otras cosas, los científicos encontró que las personas que tomaron esta píldora de agua también tuvo tasas «significativamente» más bajas de enfermedad de Alzheimer en comparación con aquellos que no tomaron el diurético.
La investigación fue extensa e incluyó experimentos con células humanas y de ratón, así como un análisis de bases de datos con información sobre medicamentos aprobados por la FDA y muestras de tejido cerebral. Los resultados destacaron a la bumetanida como un candidato «principal» para tratar la enfermedad de Alzheimer con un medicamento existente, potencialmente reutilizado.
Otros cuatro candidatos potenciales para el tratamiento también surgieron entre más de 1,300 medicamentos que ya cuentan con la aprobación de la FDA, aunque los NIH señalan que la píldora de agua fue la más fuerte entre ellos. Los investigadores reconocen que el Alzheimer es una enfermedad compleja que tiene factores tanto genéticos como de estilo de vida; como tal, puede ser necesario desarrollar múltiples terapias diferentes que puedan tratar los factores de riesgo únicos de cada paciente.
Aparte de eso, la píldora de agua se muestra prometedora como uno de esos tratamientos, aunque se necesitarán pruebas adicionales, seguidas de ensayos clínicos, para determinar si la bumetanida resiste el escrutinio. El director del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento de los NIH, Richard J. Hodes, MD, explicó:
Aunque se necesitan más pruebas y ensayos clínicos, esta investigación subraya el valor de las tácticas basadas en big data combinadas con enfoques científicos más tradicionales para identificar los medicamentos existentes aprobados por la FDA como candidatos para la reutilización de medicamentos para tratar la enfermedad de Alzheimer.